La "buena" relación entre el PNV y el PSE-EE

Tras comprobar su imposibilidad de formar gobierno tras las elecciones de 2009, las actitudes del gabinete de Ibarretxe durante las semanas que permaneció en funciones no fueron precisamente ejemplares.

Para la historia quedarán algunas de las cuestionables decisiones que se tomaron días antes de la llegada de Patxi López a Ajuria Enea como la compra acelerada de vehículos para los nuevos consejeros, el trámite hiperacelerado para la concesión de tres millones de euros a la Fundación Sabino Arana, el adelanto de las ayudas destinadas a sufragar las visitas de los familiares de presos de ETA a las cárceles o la creación de puestos en el Instituto Etxepare tras dos años de inactividad. Los socialistas vascos nos tomamos como algo comprensible –aunque institucionalmente irresponsable– la toma de aquellas decisiones. Había que tener en cuenta el shock que supuso para los inquilinos de Lakua ser democráticamente desalojados tras 30 años. Incluso nos parecieron comprensibles –aunque democráticamente censurables– las trabas que trató de poner el PNV para celebrar con celeridad la sesión de investidura del lehendakari. Lo justificamos comprendiendo que el shock de Sabin Etxea debía ser comparable al que tuvieron los inquilinos de Lakua.

Lo que no nos parece comprensible es la catarata de excesos verbales y vaticinios apocalípticos que ha venido sufriendo el Gobierno Vasco y el propio lehendakari, incluso antes de tomar las riendas del país. Que juzgue el lector:

“(La intención del PSE-EE de formar gobierno) supone un golpe institucional”. Iñigo Urkullu, presidente del PNV (04.03.09).
“Tú (Ibarretxe) eres el lehendakari de Euskadi y Euskadi lo sabe, el nuevo Gobierno nacerá de la trampa y de la mentira”. Urkullu (12.04.09).
“López es un lehendakari Pinocho”. Andoni Ortuzar, parlamentario del PNV (22.11.10).
“Patxi López será lehendakari fruto de las trampas democráticas y de la alteración de las reglas de juego”. Joseba Egibar, parlamentario del PNV (14.03.09).
“López va haciendo su camino hacia Ajuria Enea de mentira en mentira”. Ortuzar(05.04.09).
“El Gobierno es muy pobre (…) no avanza, sino que subsiste. PSE y PP son okupas del Gobierno, tienen la mayoría en el Parlamento gracias a la sucia Ley de Partidos”. Xabier Arzalluz (09.11.09).
“El PNV se pregunta si el PSE odia el euskera”. Urkullu (04.11.10).
“(Harán) una nueva ley que convierta al euskera en el vascuence, que sirva para recordar el pasado de unos pocos señores equivocados que vivieron en esta zona de España”. José Luis Garitano, parlamentario del PNV (08.02.2010).
“Cualquier iniciativa que este Gobierno adopte en el ámbito del euskera (…) para nosotros va a ser insuficiente (…). Porque para ustedes el euskera no es su lengua”. Garitano (25.03.2011).
“El Gobierno Vasco que tenemos actualmente es un gran desastre por todas partes”. José Luis Bilbao, diputado general de Bizkaia (18.01.12).
“El PNV difícilmente puede colaborar en nada con el nuevo Gobierno (…); ETA lo único que ha hecho es ponerle a Patxi López y a los suyos en el candelero”. Arzalluz(17.04.09).
“Nos representa un ministro y un país con riesgo de ser expulsado de la UE”. Garitano (08.02.10).
Periodista: “¿Ven riesgo de quiebra inminente (en Euskadi)?”. Respuesta de Urkullu: “Lo vemos, sí, lo vemos” (03.02.12).
“¿Qué le pasa a usted (lehendakari), que no entiende y como es un ignorante, ignora estos datos?”. Ricardo Gatzagaetxebarria, parlamentario del PNV (10.02.12).
“Euskadi se merece un GobiernoVasco de verdad. Un Gobierno del PNV”. Urkullu (15.01.12)

Lo que sí me parece necesario es resaltar que, con su actitud, el PNV está deslegitimando las instituciones democráticas de Euskadi y tratando de crispar a la sociedad vasca, en un momento en que necesita estar más unida que nunca para asentar la convivencia y enfrentarse de manera eficaz a la crisis económica.

Nosotros jamás hemos dicho que fueran ilegítimos los alcaldes jeltzales elegidos en las elecciones de 2007 –como el diputado general de Gipuzkoa– sin que la izquierda abertzale pudiera concurrir a las elecciones, incluso este último habiendo sido derrotado en las urnas por el PSE. A nosotros nunca se nos ha ocurrido dar lecciones de vasquidad a nadie, aun cuando nuestro partido fuera el primero en echar raíces en esta tierra. Los socialistas vascos no hemos aprovechado ninguna de las complicadas situaciones económicas vividas por nuestro país en las últimas décadas para arremeter contra el gobernante de turno. Y es que más bien para algunos sólo merece la pena defender las instituciones, la sociedad y la prosperidad de un país cuando las gobiernan ellos. Bonita forma de patriotismo.

Hoy son muchas las personas que se preguntan por qué son tan malas las relaciones entre PNV y PSE. Y es ciertamente preocupante que los dos partidos principales y más veteranos de Euskadi tengamos las dificultades que tenemos para entendernos y llegar a acuerdos de país. Mi contribución para dar alguna respuesta sobre el presente ha consistido sencillamente en tirar de hemeroteca. Mi contribución para el futuro es dejar por escrito que los socialistas vascos tenemos toda la voluntad de sentarnos, escuchar y hablar, porque ése es el principal sentido de la política. Dos no llegan a acuerdos si uno no quiere. Los socialistas queremos. ¿Y el PNV?

(Artículo publicado el 8 de marzo en Diario Noticias)