Reflexión 2
- "Estas cosas pasan. Son ciclos, unas veces estás arriba y otras veces estás abajo" - me dijo un conocido por la calle el otro día.
- "Lo malo es pensar que es como la lotería" - le respondí yo.
Y es que hay quien piensa que en España siempre va a existir una contienda entre el PP y el PSOE, partiendo de la base de que no hay más que dos opciones para gobernar. Y, efectivamente, esto hoy puede ser así, pero ¿qué puede llevarnos a pensar que siempre va a ser así?
Son muchos los que piensan que la socialdemocracia española (y vasca) siempre va a conservar un suelo electoral por encima del 30%, en función de nuestra historia y de los avances que hemos impulsado, que han sido muchos, también en los últimos años.
Porque es verdad hemos reforzado y ampliado el Estado del Bienestar, haciendo de España un país más justo. Se han subido las pensiones mínimas como nunca, a pesar de los últimos recortes, o se han multiplicado por cuatro el número de becas. Hemos puesto en marcha el cuarto pilar del Estado del Bienestar: la dependencia. Hoy son más de 700.000 las personas que tienen algún tipo de prestación y que antes de llegar nosotros al gobierno, no la tenían. Como tampoco había derecho a la educación universal, a la sanidad para todos o a las pensiones antes de que Felipe González gobernara España.
También es cierto que en los últimos años se han ampliado los derechos de la ciudadanía, modernizando España y haciendo de él un país más decente. Porque hoy vivimos en un país con menos diferencias entre hombres y mujeres, gracias por ejemplo a la ley de igualdad. Una ley que está provocando cambios en los núcleos de poder de las empresas y de la sociedad para que la mujer cobre la importancia que se merece. Y aunque parezca que esto ya existía, gracias a esta ley se ha creado el permiso de paternidad de 15 días a los padres (que no hemos podido ampliar a un mes por la crisis): casi 70.000 hombres han disfrutado de este permiso en el primer trimestre, 4.000 de ellos vascos.
Y es indudable también que vivimos en un país con menos discriminación y más preocupado por los colectivos que históricamente han sido castigados y olvidados. Por ejemplo, son miles y miles las personas gays o lesbianas que hoy se sienten mejor. Y con ellos, todos nos sentimos mejor. Porque el reconocimiento del matrimonio homosexual acabó con una injusticia histórica.
Efectivamente, del conocimiento de nuestra historia reciente se puede concluir que el Partido Socialista es protagonista principal de los grandes avances sociales y de la ampliación de derechos en el país. Así ha sido.
Pero el hecho pensar nuestra acción en el pasado - incluso en el más cercano - nos garantiza la supervivencia de nuestro proyecto en el futuro, es un grave error. Quien así piense, es que no está atento a lo que está ocurriendo en muchos lugares del norte de Europa - cuna de la socialdemocracia -, en los que los conservadores mantienen su "cuota" electoral, avanza la extrema derecha y, probablemente como reaccíon a ello y como consecuencia de nuestra crisis de identidad o de nuestra falta de valentía, crecen las opciones de izquierda radical, ecologistas, etc. Y es que la socialdemocracia en su concepción clásica ha cosechado demasiados resultados rondando el 15% de voto en feudos que hasta hace poco se daban por seguros. Y yo creo que algo de esto nos puede estar ocurriendo en España y en Euskadi.
En primer lugar, es posible que, como siempre ha ocurrido, una grave situación económica sea un buen caldo de cultivo para los discursos inmisericordes con el pobre y excluyentes con el extranjero. Creo que todos lo observamos a diario.
En segundo lugar, es casi un hecho que la socialdemocracia en general está sumida en una crisis de identidad, provocada por nuestra incapacidad para dar respuesta a los grandes problemas globales, que nos tiene atenazados. Y esto ni es una novedad, ni lo digo yo sólo, sino que lo han plasmado en diferentes escritos los mejores pensadores de nuestro tiempo.
Y en tercer lugar, se podría decir que, a los dos factores anteriores, se suma nuestro miedo o nuestra falta de valentía para combatir los discursos antisociales que, poco a poco, van ganando terreno. No deja de ser comprensible que haya miedo a ir contracorriente, puesto que sabemos que uno de los caladeros del discurso xenófobo y racista es precísamente la gente más humilde y de izquierdas (el paradigma es el sur de Francia, en el que muchos votantes pasaron del comunismo al Frente Nacional, directamente). Pero el que sea comprensible, no significa que esta actitud sea progresista. Un partido conservador democrático puede bajar los brazos e incluso sumarse a este carro. A la izquierda se le exige comprender la realidad, sí, pero también trabajar para cambiarla.
Y me explicaré con un ejemplo práctico (y así termino de paso). Cualquiera que sea la ciudad vasca o española en la que sea que viváis, todos habréis asistido en los últimos meses (también en la campaña) a discursos deslegitimadores de las ayudas sociales, del tipo "hay mucho fraude", "hay que controlar más", "es un despilfarro en tiempos de crisis", "más empleo para los de casa y menos ayuda para los de fuera", etc.
La respuesta tipo de la izquierda a esta línea de discurso, especialmente donde gobernábamos, ha sido: "nosotros estamos poniendo orden en las ayudas sociales", "el PP no controlaba tanto como nosotros el gasto social", "la mejor política social es crear empleo", etc.
¿Es esto lo que cabía esperar de quienes hemos montado el Estado del Bienestar que tanto bien ha hecho a nuestra sociedad en clave de igualdad y solidaridad? Sinceramente, creo que no. Porque, efectivamente, hay fraude en las ayudas sociales, como hay un fraude fiscal generalizado, si no, no se explicaría que tengamos cerca de un tercio de nuestra economía "sumergida". Y nuestra tarea es combatir todos los fraudes, por supuesto. Pero con más ahinco el de los que más defraudan, que son los que más daño hacen al sistema. Y, desgraciadamente, no hemos hecho demasiadas propuestas novedosas (ni viejas) en ese sentido. Como tampoco hemos puesto en valor de forma ofensiva el sistema de protección social, ni hemos combatido el cliché de que "sirve para dar de comer a los extranjeros" (cuando, por ejemplo, en Euskadi, más del 70% de los perceptores de RGI no son inmigrantes).
Creo yo que hay que echarle una pensada a todo esto si queremos que la reflexión en la que estamos metidos sea verdaderamente útil.
- "Lo malo es pensar que es como la lotería" - le respondí yo.
Y es que hay quien piensa que en España siempre va a existir una contienda entre el PP y el PSOE, partiendo de la base de que no hay más que dos opciones para gobernar. Y, efectivamente, esto hoy puede ser así, pero ¿qué puede llevarnos a pensar que siempre va a ser así?
Son muchos los que piensan que la socialdemocracia española (y vasca) siempre va a conservar un suelo electoral por encima del 30%, en función de nuestra historia y de los avances que hemos impulsado, que han sido muchos, también en los últimos años.
Porque es verdad hemos reforzado y ampliado el Estado del Bienestar, haciendo de España un país más justo. Se han subido las pensiones mínimas como nunca, a pesar de los últimos recortes, o se han multiplicado por cuatro el número de becas. Hemos puesto en marcha el cuarto pilar del Estado del Bienestar: la dependencia. Hoy son más de 700.000 las personas que tienen algún tipo de prestación y que antes de llegar nosotros al gobierno, no la tenían. Como tampoco había derecho a la educación universal, a la sanidad para todos o a las pensiones antes de que Felipe González gobernara España.
También es cierto que en los últimos años se han ampliado los derechos de la ciudadanía, modernizando España y haciendo de él un país más decente. Porque hoy vivimos en un país con menos diferencias entre hombres y mujeres, gracias por ejemplo a la ley de igualdad. Una ley que está provocando cambios en los núcleos de poder de las empresas y de la sociedad para que la mujer cobre la importancia que se merece. Y aunque parezca que esto ya existía, gracias a esta ley se ha creado el permiso de paternidad de 15 días a los padres (que no hemos podido ampliar a un mes por la crisis): casi 70.000 hombres han disfrutado de este permiso en el primer trimestre, 4.000 de ellos vascos.
Y es indudable también que vivimos en un país con menos discriminación y más preocupado por los colectivos que históricamente han sido castigados y olvidados. Por ejemplo, son miles y miles las personas gays o lesbianas que hoy se sienten mejor. Y con ellos, todos nos sentimos mejor. Porque el reconocimiento del matrimonio homosexual acabó con una injusticia histórica.
Efectivamente, del conocimiento de nuestra historia reciente se puede concluir que el Partido Socialista es protagonista principal de los grandes avances sociales y de la ampliación de derechos en el país. Así ha sido.
Pero el hecho pensar nuestra acción en el pasado - incluso en el más cercano - nos garantiza la supervivencia de nuestro proyecto en el futuro, es un grave error. Quien así piense, es que no está atento a lo que está ocurriendo en muchos lugares del norte de Europa - cuna de la socialdemocracia -, en los que los conservadores mantienen su "cuota" electoral, avanza la extrema derecha y, probablemente como reaccíon a ello y como consecuencia de nuestra crisis de identidad o de nuestra falta de valentía, crecen las opciones de izquierda radical, ecologistas, etc. Y es que la socialdemocracia en su concepción clásica ha cosechado demasiados resultados rondando el 15% de voto en feudos que hasta hace poco se daban por seguros. Y yo creo que algo de esto nos puede estar ocurriendo en España y en Euskadi.
En primer lugar, es posible que, como siempre ha ocurrido, una grave situación económica sea un buen caldo de cultivo para los discursos inmisericordes con el pobre y excluyentes con el extranjero. Creo que todos lo observamos a diario.
En segundo lugar, es casi un hecho que la socialdemocracia en general está sumida en una crisis de identidad, provocada por nuestra incapacidad para dar respuesta a los grandes problemas globales, que nos tiene atenazados. Y esto ni es una novedad, ni lo digo yo sólo, sino que lo han plasmado en diferentes escritos los mejores pensadores de nuestro tiempo.
Y en tercer lugar, se podría decir que, a los dos factores anteriores, se suma nuestro miedo o nuestra falta de valentía para combatir los discursos antisociales que, poco a poco, van ganando terreno. No deja de ser comprensible que haya miedo a ir contracorriente, puesto que sabemos que uno de los caladeros del discurso xenófobo y racista es precísamente la gente más humilde y de izquierdas (el paradigma es el sur de Francia, en el que muchos votantes pasaron del comunismo al Frente Nacional, directamente). Pero el que sea comprensible, no significa que esta actitud sea progresista. Un partido conservador democrático puede bajar los brazos e incluso sumarse a este carro. A la izquierda se le exige comprender la realidad, sí, pero también trabajar para cambiarla.
Y me explicaré con un ejemplo práctico (y así termino de paso). Cualquiera que sea la ciudad vasca o española en la que sea que viváis, todos habréis asistido en los últimos meses (también en la campaña) a discursos deslegitimadores de las ayudas sociales, del tipo "hay mucho fraude", "hay que controlar más", "es un despilfarro en tiempos de crisis", "más empleo para los de casa y menos ayuda para los de fuera", etc.
La respuesta tipo de la izquierda a esta línea de discurso, especialmente donde gobernábamos, ha sido: "nosotros estamos poniendo orden en las ayudas sociales", "el PP no controlaba tanto como nosotros el gasto social", "la mejor política social es crear empleo", etc.
¿Es esto lo que cabía esperar de quienes hemos montado el Estado del Bienestar que tanto bien ha hecho a nuestra sociedad en clave de igualdad y solidaridad? Sinceramente, creo que no. Porque, efectivamente, hay fraude en las ayudas sociales, como hay un fraude fiscal generalizado, si no, no se explicaría que tengamos cerca de un tercio de nuestra economía "sumergida". Y nuestra tarea es combatir todos los fraudes, por supuesto. Pero con más ahinco el de los que más defraudan, que son los que más daño hacen al sistema. Y, desgraciadamente, no hemos hecho demasiadas propuestas novedosas (ni viejas) en ese sentido. Como tampoco hemos puesto en valor de forma ofensiva el sistema de protección social, ni hemos combatido el cliché de que "sirve para dar de comer a los extranjeros" (cuando, por ejemplo, en Euskadi, más del 70% de los perceptores de RGI no son inmigrantes).
Creo yo que hay que echarle una pensada a todo esto si queremos que la reflexión en la que estamos metidos sea verdaderamente útil.
Comentarios
Tu me has dicho a mi que pertenezco al partido naZionalista vasco. vamos que soy un nazi, y despues haciendo guasa de ello.
Como decia Xabier Intza,..... esos que nos llaman nazis hace dos semanas, son los mismos que vienen a pedir sopitas ahora al PNV. a pedir responsabilidad. Con esa gente nos jugamos los cuartos.
Y encima la culpa de que Bildu gobierne en Gipuzkoa es del PNV segun loppez. eso si, Buen dice que pueden llegar a acuerdos puntuales con Bildu. Y pastor una cosa y la otra.
Lotsagarrie!!!
Un amigo me dijo hace tiempo que siempre que hay mucha gente cabreada, hay alguien que no lo está tanto, y en este caso lo podemos ver en la derecha (los menos cabreados y por supuesto menos preocupados por la inmigración) y en las personas humildes, con cuyos sentimientos y miedos pretenden jugar creándoles la idea de que con el paro que hay no debemos dar trabajo a los inmigrantes, y que los españoles que trabajan lo hacen para pagar las prestaciones sociales de estos inmigrantes. Un mal antropológico o sociológico (ni puñetera idea de qué tipo) que afecta a todas las sociedades muy desarrolladas en las que es fácil alentar el sentimiento de que todo lo que tenemos lo hemos conseguido nosotros y que nadie venga a quitárnoslo...
Por otra parte, dudo de que la labor de un partido socialista sea la de poner el acento en lo sumamente rigoroso que es en la adjudicación de esta o aquella ayuda social dejando la sospecha sin quererlo (eso espero) en que hay personas que intentan defraudar, especialmente inmigrantes.
Dudo que la mejor manera de combatir la xenofobia sea ceder posiciones ante la derecha.
Nos vienes a hacer reflexiones trampa ( en miopinion) de lo ocurrido. Obvias lo que ha ocurrido en Euskadi. La mayoria social vasca dice que no quiere vuestro pacto, que es pasado. Loppez esta erre que erre con lo suyo, con el monotema, es decir su sillon. Como se nota que basagoiti le dice que es lo que quiere escuchar de su voca. De verguenza, oscar, de verguenza.
Autocritica es la de Elorza, y punto!!!!!!
La jaula de grillos esta en el PSE de momento y no en otro partido. Los cuchillos vuelan en vuestro partido oscar, y no en los otros. El problema lo teneis vosotros.
Dejar de echar las culpas a los de mas de una vez.
Mientes cuando en tu anterior post dices que junto con el PNV liderasteis el proceso de paz del 2007. Te repito que llamasteis al PNV de apagafuegos. Lo mismo que haceis ahora cuando veis que no os vais a comer nada. Tocando la puerta del PNV una semana y media despues de tratar de echar al PNV de alli donde podiais pactando con el PP.
La sociedad vasca os ha dado en toda la boca, ZAS!!!
Como me gusta ser de un partido rural.
Te dejo la reflexion del PNV sobre la actualidad vasca, y no la paja con la que tratas de esconderla tu, Oscar.
http://urkullu.eu/2011/05/31/de-sustancias-y-circunstancias/
http://urkullu.eu/2011/06/02/los-viajes-del-pnv/
Menuda pataleta que tiene el loppez, oscar. UUyyyyyy ......
Por otro lado, veo que tienes muy claras las razones de nuestro malísimo resultado. No tengo, amigo (o amiga) tu clarividencia y seguridad para todo ("autocrítica es lo de Elorza y punto!!!!!", dices). Por otro lado, no te envidio, me parece muy peligroso tener tanta seguridad cuando hablamos de cuestiones tan interpretables.
Salud
Como tan grande es la realidad que vosotros, despues de ver que los numeros no os dan, a pedir sopitas y respaonsabilidad al PNV.
Eguiguren, el que dice que "siempre" ha sido partidario de pactar con el PNV ya pudo haberselo dicho a Ibarretxe hace dos años. al parecer en aquel entonces, segun eguiguren, el problema no era el candidato, si no que la sigla. Que ha ocurrido ahora?? sera que los numeros no os dan, oscar???
Te repito que mientes cuando dices que el PNV lidero el proceso de paz con vosotros en el 2007. Se le llamo de apgafuegos, cuando ya todo estaba hecho un cisco.
Tambien mientes y TRATAS de engañar con el tema aquel de la caligrafia. sigo esperando el que reconozcas que en eso tambien te equivocaste. tratabas de hacerme creer algo a sabiendas de que era mentira. simple y llanamente para salirte con la tuya, te daba igual si mentias, lo importante era hacerme creer que tu estabas en lo correcto. reflejo de la politica del PSE y consecuencia de la ostia que os habeis dado. Amen.
Menuda pataleta que tiene loPPez con los ""viajes"" del PNV.je je je....