¿Vuelta a la clandestinidad?
Hace unos días que la alcaldesa de París o el último presidente de la República, ambos socialistas, no estuvieron presentes en el 78 Congreso del Partido Socialista francés. Tampoco asistió el último primer ministro, Manuel Valls, que se ha cambiado de bando. Hollande es repudiado por la actual jefatura del PSF y, por su parte, Hidalgo parece estar valorando la mejor fórmula partidaria para concurrir a las elecciones a la alcaldía de la capital francesa que se celebrarán en 2020. Ante semejante panorama, el secretario general del PSOE, único dirigente extranjero que había confirmado su presencia en el cónclave, también se excusó a última hora a cuenta del “tema de Estado” de las últimas semanas: el máster fantasma de Cifuentes. En fin. Lo cierto es que extrañas ausencias, repudios varios y deserciones más o menos justificadas son todas consecuencia del verdadero problema: el PSF pasó de trescientos a treinta diputados en las últimas elecciones a la Asamblea Nacional y no llegó al ...