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Mostrando entradas de abril, 2014

El PSOE y el PSE-EE necesitan muchos Gascos

De un tiempo a esta parte vivo la política y la acción de mi partido en España y en Euskadi desde la distancia a la que, afortunadamente, me obligan mi familia, mis estudios y mi trabajo. Sin embargo, tal y como pensaba hasta el día en el que dejé la actividad parlamentaria, pienso que la Socialdemocracia, la Izquierda sigue sumida en una grave crisis de identidad y de modelo (puertas adentro y puertas afuera, aunque hoy me centraré en este segundo). Lógicamente, esta crisis de provoca una pérdida de cuota electoral. Aunque el hecho de que en muchos países occidentales haya sido la propia Socialdemocracia la que diera los primeros pasos en la ejecución de las políticas de la austeridad impulsadas por los conservadores, haya ayudado a esa crisis de modelo. Ello añade un problema (otro más) muy serio en materia electoral, la falta de credibilidad. Lo que explica, por ejemplo, que a pesar de llevar más de dos años gobernando y a pesar de de los malos datos (20% de las personas en pobrez

Fracaso, fuente de éxito

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Son muchas las ocasiones en las que nuestros responsables institucionales, sociales y económicos evocan las bondades de otros países a los que, en principio, nos gustaría parecernos. Por ejemplo, se escucha con frecuencia que aún debemos recorrer un trecho para asimilarnos a nuestros admirados países nórdicos en términos de confianza en las instituciones. Y la afirmación es atinada, porque quienes tendemos a desconfiar de Parlamento en España somos el 85%, entre 20 y 40 puntos por encima de Suecia, Holanda o Dinamarca. O también se suele escuchar – especialmente estos días, tras la presentación de las primeras medidas fruto del acuerdo fiscal alcanzado en Euskadi – que para converger con los países más avanzados de la UE, debemos hacer que la fiscalidad sea más justa. Tampoco les falta razón a quienes dicen esto. En Dinamarca, Suecia o Finlandia los ingresos públicos totales por habitante en 2011 fueron de 24.000, 21.000 y 19.000 euros respectivamente. Mientras tanto, en España